La importancia del diálogo para la Psicoterapia Existencial

El interés y la intención del psicoterapeuta existencial consiste en nutrir un diálogo con el paciente y que, a través de reflexionar acerca de su situación (aquella que ve como problema), puedan ser exploradas nuevas posibilidades. Oportunidades en cuya invención o perfeccionamiento el paciente participa activamente. Estas transformaciones consisten y resultan del diálogo, del flujo de una nueva manera de contarnos nuestra historia.
Un proceso dialéctico por definición no se resuelve, no llega a una conclusión, pues en el momento que creemos “agarrar” la verdad, ésta se nos escapa. Sin embargo, el proceso dialógico es un acompañamiento que orienta el manejo de las tensiones de la existencia humana. Los conflictos se generan continuamente para ser superados y sólo para ser reinsertados en nuestra vida de una manera diferente. Las paradojas son inevitables y la vida fluye desde fuerzas contradictorias que trabajan en contra y con otras fuerzas.
De lo anterior, la verdad no puede ser revelada; no hay una descripción ni una interpretación correcta de un acontecimiento. Cada descripción, cada interpretación es una versión de la verdad. La verdad se construye a través de la interacción de los participantes y es contextual (lugar, tiempo, quien la experimenta, con quienes la experimenta, etc.).
La interpretación, la comprensión y la búsqueda de la verdad nunca cesan, pues a partir de nuestro encuentro generamos reflexiones que nos llevan a entender el mundo y a los otros de una manera diferente y, así, a entendernos diferente a nosotros mismos: un círculo infinito.