DICKENS (Tiempos difíciles, 1854)

tiempos-dificiles-dickens

“- ¡Ay, ay, ay! -exclamó el caballero, encantado de haber llegado sin el menor esfuerzo a donde quería-. ¡De eso se trata! Nunca tienes que imaginar.

-Nunca tienes que hacer, Cecilia Jupe -repitió solemnemente Thomas Gradgrind-, nada por el estilo.

Hechos, hechos, hechos! -dijo el caballero. Y «¡Hechos, hechos, hechos!» repitió Thomas Gradgrind.

-Has de guiarte y dejarte gobernar en todas las cosas -dijo el caballero- por los hechos. Esperamos contar, antes de que pase mucho tiempo, con un consejo de hechos, compuesto por comisarios de hechos, que forzarán a la gente a ser personas de hechos y de nada más que hechos. Tienes que desterrar por completo la palabra imaginación.  No has de tener nada que ver con ella. No habrás de tener, en ningún objeto de uso ni en ningún adorno, nada que esté con contradicción con los hechos. En la realidad no caminas sobre flores; no se te puede permitir que camines sobre flores en alfombra. Tampoco sucede que ni pájaros desonocidos ni mariposas vengan a posarse en tu vajilla; no se te puede permitir que pintes pájaros desconocidos ni mariposas en una vajilla. Nunca te encuentras cuadrúpedos que suba y bajen por las paredes; no tienes que tener cuadrúpedos representados en las paredes. Habrás de usar -siguió el caballero- para todas esas finalidades, combinaciones y modificaciones (en colores primarios) de figuras matemáticas que son susceptibles de prueba y demostración. Ése es el nuevo descubrimiento. Eso son hechos. Eso es buen gusto”.

Charles Dickens, Tiempos difíciles, Tr. José Luis López Muñoz. Madrid: Alianza, s.n.i, 2010.

Puede interesarte  Berkeley y la existencia del mundo
,

Agenda una cita